Comisiones Obreras - FSC Cantabria | 6 mayo 2024.

SODERCAN asciende a la máxima categoría vitalicia a la candidata nº2 del PSOE al Congreso y presidenta del Comité de Empresa.

  • El nombramiento se efectúa 48 horas antes del inicio de la negociación del convenio.

CCOO denunció el pasado diciembre que la empresa dirigida por Salvador Blanco se disponía a asignar con carácter perpetuo dos puestos de la máxima categoría en la clasificación profesional, Coordinador, a través de un procedimiento totalmente opaco, sin intervención ni fiscalización de méritos por parte de la representación de los trabajadores, es decir, de manera discrecional.

15/03/2017.
Sodercan

Sodercan

Según indica CCOO, en una empresa pública pueden darse dos tipos de nombramientos: bien discrecionales de duración limitada, bien asignación de categorías permanentes por procedimientos garantistas (desde la definición de requisitos y perfiles, hasta la valoración de méritos). Pero considera este sindicato una aberración que se nombre a dedo cargos para siempre.
 
La vicepresidenta Eva Tezanos replicó entonces que todo era legal, y que había sido bendecido por el Comité de Empresa. Ciertamente, la mayoría de UGT en el órgano de representación de los trabajadores dio su visto bueno a la oferta de plazas, con la oposición de los representantes por CCOO. Ahora resulta que una de las plazas ha sido asignada a la presidenta de dicho comité, Zoraida Hijosa, quien además ocupa el puesto número dos de la lista del PSOE al Congreso de los Diputados (inicialmente era la nº 3, pero tras la dimisión de Puerto Gallego ocupa el nº 2 tras el diputado Cortés)
 
Como antecedentes a estos nombramientos vitalicios sin garantías, cabe recordar la primera asignación de categorías tras la entrada en vigor del convenio colectivo. La Dirección aprovechó la negociación del ERE de 2012 para colar en el acuerdo la asignación de categorías de todo el personal, sin posibilidad de discusión, so pena de despedir a 32 trabajadores en lugar de 19. Como puede verse, una asignación de categorías sin ninguna garantía, pues no se compararon méritos, y los sindicatos hubieron de aceptarla bajo amenaza de muchos más despidos. Casualmente, el entonces presidente del Comité de Empresa resultó agraciado en tan discrecional adjudicación con la máxima categoría de carácter perpetuo, Coordinador, como la actual presidenta, no sin antes verse incluidos en la lista de despedidos los compañeros de su área que acumulaban claramente más méritos, antigüedad, titulación y experiencia, entre ellos quien durante 27 años había venido ejerciendo esa responsabilidad.
 
El siguiente antecedente data de 2014, cuando la Dirección publicó la oferta de  dos plazas de similar categoría a las hoy asignadas. Entonces, el mismo comité, con la misma composición y a instancias de la misma presidenta de hoy, se opuso con el argumento de que no se debía nombrar a perpetuidad sin procedimiento garantista. En su lugar se pactó con la dirección, en tanto se revisaban los procedimientos, que se cubrieran discrecionalmente esas plazas, pero como personal de confianza, revocables en cualquier momento. Así se hizo tras anular la oferta y nombrar a dos trabajadores y, de hecho, Salvador Blanco revocó los dos nombramientos cuando volvió a SODERCAN.
 
Sin embargo, tal como denunció CCOO el pasado diciembre, ahora se hace caso omiso de ese acuerdo y se decide nombrar de nuevo a perpetuidad, con el acuerdo del mismo comité y presidenta, y por el mismo procedimiento previamente rechazado, dos coordinadores, recayendo una plaza de nuevo en la Presidenta del Comité de Empresa que, antes no pero ahora sí, da el visto bueno al modo de actuar; además de ser, como ya se ha dicho, candidata nº 2 del PSOE al Congreso de los Diputados. El nombramiento, además, se ha producido 48 horas antes del comienzo de las negociaciones para un nuevo convenio colectivo que debería poner orden en el régimen de promociones de categorías profesionales.
 
CCOO denuncia el desprecio que este proceder supone para el resto de la plantilla y que supone un nuevo borrón en la gestión, esta vez de RRHH de SODERCAN, incompatible con las exigencias de transparencia, mérito e igualdad de oportunidades que ha de operar en la Administración Pública.